Un nuevo trabajo de investigación está desafiando una creencia arraigada en la comunidad de control del tabaco. Por mucho tiempo, alternativas potencialmente menos dañinas como los cigarrillos electrónicos han sido descartadas debido a la "falta de evidencia"." En tanto, los investigadores Derek Yach y Gerhard Scherer están presentando una herramienta prometedora que podría cambiar esta narrativa: los biomarcadores.
"La reticencia a aceptar productos de nicotina menos dañinos, como los cigarrillos electrónicos, siempre ha tenido sus raíces en el miedo a lo desconocido y el deseo de evidencia a largo plazo. Nuestra investigación ahora presenta un método sólido para cerrar esta brecha de conocimiento antes de lo que se imaginaba", dijo Derek Yach, uno de los autores del estudio.
Los biomarcadores son sustancias medibles en nuestro cuerpo, presentes en fluidos, tejidos y células. Entregan información sobre nuestra exposición a ciertos compuestos y posibles efectos fisiológicos. El uso de estos biomarcadores podría revolucionar la manera en que evaluamos el potencial de reducción de daños de los productos de tabaco y nicotina de nueva generación (NGPs, por sus siglas en inglés). En lugar de esperar décadas para comprender los efectos a largo plazo de estos productos, podemos confiar en estos indicadores para realizar evaluaciones más rápidas.
"El futuro de la salud pública depende de que adoptemos metodologías modernas. Los biomarcadores ofrecen una instantánea en tiempo real de los niveles de exposición, eliminando el tradicional período de espera de 40 a 50 años para comprender los efectos de los nuevos productos en nuestra salud", comentó Gerhard Scherer, coautor de la investigación.
Una aplicación de importancia crítica de esta tecnología está en la industria de seguros de vida y salud. Actualmente, la mayoría de las aseguradoras no reconocen el riesgo drásticamente reducido que representan los productos de nicotina alternativos libres de humo, en comparación con los cigarrillos combustibles.
"Las aseguradoras y sus clientes podrían salir ganando si cuantificaran y redujeran mejor el riesgo de fumar, utilizando nuevas tecnologías como los biomarcadores", señaló Derek Yach.
Con más de mil millones de personas en todo el mundo enfrentando riesgos para la salud debido al consumo de cigarrillos combustibles y la asombrosa cifra de ocho millones de muertes relacionadas con dichos cigarrillos anualmente, no se puede subestimar la urgencia de encontrar alternativas más seguras. Los productos de nueva generación (NGPs, por sus siglas en inglés), como los cigarrillos electrónicos y los productos de tabaco calentados, apuntan a un futuro con menos daños causados por el tabaco. Este estudio podría ser la clave para desbloquear ese futuro.
Vea el seminario web aquí sobre el innovador trabajo de investigación, que se llevó a cabo el miércoles 13 de septiembre a las 10 a.m. EST.